Pese al avance de las tecnologías la biblioteca sigue viva.
Evoluciona y diversifica sus servicios y amplía sus actividades.
Entre su acervo y servicios, la Biblioteca Central del Estado, cuenta en la actualidad con más de veinticinco mil libros en formato clásico, y media docena de computadoras con enlace a internet, además más una sala de usuarios para lectura formativa, y un departamento de procesos técnicos para catalogación, clasificación y alta de acervo a estantes.
Asimismo cuenta con un equipo de vinculación a la comunidad vía correo electrónico, y servicio de guía para visitas especializadas de escuelas y grupos de adultos interesados en el conocimiento de ese tipo de servicios educativo-formativos.
Existe además una sección para ciegos y débiles visuales, con audio libros, así como también existe el personal justo en la atención de los visitantes, para que reciban las mejores formas y procedimientos de atención profesionalizada. Si bien es cierto que las bibliotecas padecen las competencias de las tecnologías, también es cierto que este espacio tiende a digitalizarse para ofrecer mejores alternativas en su desempeño.
Vale citar que el concepto y la parte concreta de las bibliotecas, es un logro de la inteligencia y sensibilidad, sobre todo del siglo diecinueve cuando comienza a redondearse la idea de que el conocimiento requería principios organizativos que lo hicieran accesible y democrático, para servicio de toda la población.
Estos trascendentes espacios fueron concebidos con el propósito de beneficiar, sobre todo, a las clases sociales más desfavorecidas en lo económico. Sin embargo, la necesidad de la formación y el conocimiento, más allá de los útiles datos que ahí pueden localizarse, son una inquietud colectiva.
En la actualidad, la biblioteca debe vincularse a la comunidad de manera más estratégica. Es decir, el nuevo planteamiento es ir en busca del usuario a manera no sólo de lector, sino como visionario de su propio desarrollo, a través de actividades que le sean significativas.
Es por ello que se invita a grupos que forman comunidades, tales como bandas de rock, fotógrafos, pintores, tribus urbanas, asociaciones de apoyo humanitario, intelectuales y personas con posturas vanguardistas en materia de cultura en general.
Si bien la biblioteca podrá transformarse en sus formas, siempre será un espacio para estudiar, leer y ser pensantes ante las diferentes fenomenologías de la existencia. Sobre todo es un lugar desautorizado para la marginación, ya que todo mundo tiene presencia, voz y silencio inteligente.
Los interesados pueden recibir mayores informes sobre los servicios que se ofrecen al teléfono 8121302.
