
La operación se llevó a cabo tras el seguimiento de los reportes anónimos recibidos y las labores de inteligencia de los efectivos de la GCE. Las cámaras, cada una con un módem inalámbrico, estaban presuntamente instaladas por un grupo criminal con el propósito de monitorear y seguir los desplazamientos de las unidades policiales y militares.
Las cámaras fueron inmediatamente desinstaladas y aseguradas, quedando como evidencia ante la Fiscalía General del Estado para las averiguaciones correspondientes.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado exhorta a la población a denunciar cualquier hecho que pueda vulnerar la paz de las y los potosinos a través de los números de emergencia 911 y de Denuncia Anónima 089.
Esta acción subraya el compromiso de las autoridades con la seguridad y protección de la ciudadanía, y destaca la importancia de la colaboración comunitaria para mantener la seguridad en el estado.






