
La mujer que graba el vídeo muestra su indignación contra la alcaldesa de Villa de Reyes, Erika Briones Pérez, por solicitar una cuota tan elevada para que personas con necesidad de trabajar puedan vender unos cuantos ramos aprovechando la fiesta católica de este domingo.
El déspota inspector intentó justificarse en sus actos pero sólo exhibió más su miseria humana cuando intimidó al ciudadano con una amenaza explícita “retírense si no mandamos por ustedes” con la intención de coartar su derecho de expresión y libre difusión de imágenes.
Así las cosas en un municipio gobernador por una persona que llegó de Soledad con toda su gente solo para servirse de la riqueza del Valle de San Francisco y entregar a los fraccionadores Áreas Naturales Protegidas.




