Circuito Nopal ha cambiado la vida en municipios

– Con talleres artísticos han cobrado vida sus centros culturales.

– Casi 400 alumnos han participado en un semestre en 17 municipios.

Charcas, Cedral, Real de Catorce, San Nicolás Tolentino y Ciudad del Maíz son algunos de los municipios que más han destacado durante el desarrollo del “Circuito NOPAL”, (Núcleos Organizados en Pro del Arte Local), en el que participan como alumnos alrededor de 400 potosinos de 17 municipios de las cuatro Zonas del Estado, donde se cuenta con casas de la cultura, así como con la colaboración de un equipo de 15 talleristas en las áreas de artes visuales, artes plásticas y artes escénicas.

Lo anterior fue revelado por Paola Torres y Ernesto Álvarez, quienes tienen a su cargo la coordinación del proyecto, quienes revelaron que actualmente practican una reestructuración de los talleres “porque hay áreas a fortalecer” para el tercer trimestre de septiembre a noviembre, que será el último del programa para este año, y se está identificando lo que se pide en cada municipio, cuáles fueron los talleres más significativos para fortalecerlos, y cuáles los de menor impacto para aplicar una estrategia que levante los resultados.

Los talleres de mayor interés son los que tienen qué ver con artes plásticas y visuales; mientras que los de más dificultad para que la gente los acepte son los que tiene qué ver con artes escénicas, “ya que la gente no ama lo que no conoce”, acotó Paola Torres, quien subrayó que en Charcas, por ejemplo, nunca antes habían tenido teatro, y ahora que lo conocieron piden que los maestros permanezcan y es justo lo que se está haciendo ahora, reforzando ese taller, ahora que los jóvenes lo conocieron.

Dentro del primer semestre del Circuito NOPAL, comenta Ernesto Álvarez, se ha contado con una plantilla fija de 15 talleristas, de los cuales para el tercer trimestre se quedarán algunos, y se fortalecerá el equipo con algunos otros, además de que se están buscando A talleristas locales para fortalecer las áreas que se están pidiendo en los municipios.

Por ejemplo, la gente rechaza el teatro, pero quiere clases de canto, por lo cual en áreas como esa se buscan talleristas locales y así la gente se involucra más. Para ello, comenta Paola, se identificó que hay un grupo de maestros de música y canto que saben moverse por el municipio y tienen experiencia profesional y educativa, lo que nos hará más fácil enviarlos a algún municipio de la Huasteca, a diferencia de mandarlos desde aquí de la Capital.

En materia de alumnos, de acuerdo al último conteo, el número oscila entre 300 y 400, ya que hay talleres numerosos de 27 alumnos y algunos otros de sólo 7, dependiendo de la modalidad que se está impartiendo.

Para el próximo trimestre se estima que podría crecer el número de beneficiarios, “aunque esto es variable, ya que hay grupos que han comenzado con dos personas y terminan con 17 alumnos; otros comienzan con 30 y terminan con 10, entonces pensamos que llevando a ciertos municipios los talleres que ellos piden, se van a integrar en mayor número, agrega Ernesto.

Sin embargo, Paola Torres comenta que lo aprendido en este proceso es que los números no son prioridad, porque hemos visto grupos que han iniciado muchos alumnos que luego se han ido depurando, y se quedan los que de verdad quieren terminar ese proceso, y hemos visto grupos que tal vez no sea tan conveniente que aumente, como en Ciudad del Maíz, donde hay un grupo de teatro con 12 elementos que se han mantenido constantes desde el principio, entonces hay no interesaría que crezca, sino que ese grupo que con 6 meses trabajando realizara un montaje al final de los 9 meses y ese sería un gran resultado, más allá de que aumente o disminuya, es un producto y la satisfacción de los jóvenes.

Actualmente la capacitación se da en las áreas de artes plásticas, artes visuales y artes escénicas, distribuidas entre teatro y danza, agrega Paola Torres, quien señala que algo que mantiene con toda la energía a los integrantes del proyecto es que muchos de los alumnos, dicen que con él les ha cambiado la vida, después de que en sus municipios donde no había vida en sus recintos culturales, o donde no había nada qué hacer por las tardes, ahora se trasladan de sus comunidades para asistir a los talleres, desde pequeñitos de unos 7 años, quienes ya está realizando obras que nos impactan; “creo que eso es lo que nos está dejando satisfechos”.

Ernesto Álvarez interviene para señalar que otro aspecto caso muy específico y muy positivo es la identificación de talentos artísticos dentro de los municipios, donde algunos chicos son “muy, muy rescatables y no habían tenido oportunidad de recibir educación artística, pero ahora pueden sobresalir mucho y pueden ser el referente de sus municipios”, concluyó.