OPINIÓN

La soga al cuello : #EsClaudia

Todos los hombres son falsos,

tramoyistas y embusteros;

a quien le toque esa china

que la guarde en el sombrero.

Fernán Caballero.

Cuentos y poesías populares andaluces (1859)

 

 

Se quedaron vestidos y alborotados. No hay razón para dudar que la intención de la gobernadora de la Ciudad de México Claudia Sheinbaum para viajar a San Luis Potosí fue interrumpida por un evento fortuito e impredecible, las exhalaciones de ceniza del volcán Popocatépetl provocaron el cierre de operaciones en el aeropuerto. En las instalaciones de la Feria Nacional Potosina, un auditorio repleto de simpatizantes se quedaron con ganas de vitorear a la que para muchos ya es la virtual corcholata presidencial del movimiento de regeneración nacional (MORENA).

 

El auditorio estaba conformado por un porcentaje similar de morenos y verdes, el acuerdo previo fue con el afán de participar de buena fe sin que aquello se convirtiera en un juego de vencidas. Indudablemente el gobernador Ricardo Gallardo Cardona tiene la capacidad para convocar a las “fuerzas vivas” de la gallardía cada que se requiere mover una multitud de porristas. Para el jefe del ejecutivo todo se trata de cantidad, una plaza llena y la respectiva foto desde arriba del tapanco vale más que un discurso rabón y sin substancia. El construyó así la percepción de campaña arrolladora en el proceso electoral que lo llevó a gobernar el estado, y le funcionó.

 

Cómo explicarle a los potosinos que al equipo de campaña de Claudia Sheinbaum les andan valiendo tres vueltas de tuercas San Luis Potosí, bueno, quizás exagero,  en el orden de las prioridades no está un estado con el 2% del electorado nacional. Al igual que Tlaxcala o Colima, bueno, Colima no, mejor digamos, Nayarit, la mayoría de los gobernadores tienen que hacer cita por anticipado y esperar meses para conseguir una audiencia con el presidente de la república o el secretario de gobernación. Más o menos como aquí cuando el alcalde de Alaquines pide ver al gobernador para conseguir un adelanto de participaciones federales.

 

Las dos facciones en el estado con mayor representatividad dentro de los partidarios de la cuarta transformación se disputaron el derecho a ser los anfitriones de la que se supone pronto será la candidata presidencial, el gallardismo y el gabinismo son desde hace tiempo los referentes políticos predominantes. El delegado de la secretaría del bienestar Gabino Morales se posicionó después de la elección de consejeros políticos estatales donde obtuvo ¾ partes del órgano de representación, incluso con la tardía y desorganizada intervención gallardista al mando de Ignacio Segura Morquecho secretario de desarrollo social en el estado y el diputado José Luis Fernández alias “el chiquis”. Menudo papelazo hicieron que con la morralla que juntaron les ajustó para negociar un par de carteras en el comité directivo estatal.

 

Ahora todos están montados en la elección presidencial (verdes y morenos) y se disputan la agenda y los eventos. La decisión fue salomónica, el equipo de campaña de Claudia Sheinbaum optó por mantener un equilibrio entre el partido y el gobierno, cada grupo aportaría la mitad de gente en un auditorio calculado en siete mil asistentes y que sin el menor empacho el patronato de la feria aportó gratuitamente (al rato van a decir que lo rentaron y si se pagó). Como en los viejos tiempos de la era príista. Se midieron las estructuras de cada grupo, el acarreo a todo lo que daba, las huestes gallardistas ya están muy hechas a la idea, ya se saben la tonada y la dinámica. Los “gabinistas” tienen poco rato aprendiendo las tácticas del clientelismo, incluso ya van tarde, después de cinco años de manejar los programas asistenciales del gobierno federal, deberían ser la fuerza política predominante en el estado.

 

El problema de los morenos es que pierden mucho tiempo en grillas estúpidas, y Gabino Morales en particular siempre gusta de buscarse un némesis, así como terminó por enemistarse con Sergio Serrano que fue su mentor y compañero fundador de Morena en San Luis Potosí, ahora se entretiene con rencillas estériles con el diputado Cuahutli Badillo y se ha distanciado de Rita Ozalia Rodríguez, la misma a quien eligió para ser la dirigente estatal hace poco menos de un año. Aunque siendo honestos, en este juego de mentiras, fintas y promesas incumplidas Rita sabe que Gabino la promovió para liderar el partido como un salvoconducto, su poderosa hermana Rosa Icela Rodríguez comanda la policía federal y es una de las piezas claves del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Como diría el doctor House: todos mienten.

 

Todo parece indicar que el gobernador quiere agarrar al negociador de Morena con la mano tronchada, pero entre que se ha pasado los días reclutando alcaldes priistas y panistas para afiliarse a las filas de partido verde, y ahora que hizo su apuesta por la jefa de gobierno de la Ciudad de México, corre el riesgo de que si la moneda cae del otro lado y es Adán Augusto López el afortunado ganador de la contienda, se le reduzcan los márgenes de negociación. El secretario de gobernación es un político de la vieja escuela, de esos que valoran las lealtades y enaltecen las complicidades. Como diría el clásico: la vida es una tómbola.

 

Gabino Morales ha manifestado públicamente que buscará la candidatura al Senado o a la alcaldía de la capital por Morena, nadie fuera de sus seguidores se ha entusiasmado, no mencionó la posibilidad de contar con el apoyo de partido verde, (de antemano sabe que no cuenta con ellos) y mejor se despega de la posibilidad. Ahora ha rescatado del ostracismo al anterior candidato de la gallardía a la capital, Leonel Serrato Sánchez, ya se ha visto por los rumbos de la secretaría del bienestar y se rumora que ocupará su lugar cuando pida licencia para ser candidato. Ese puede que sea su peor error, pero como diría mi abuelo: en este mundo cada quién elige cómo quiere morir.

 

Por su parte el gobernador tiene una ruta muy clara, sea quien sea el candidato presidencial (o la candidata) tienen que reconocer quién es el gallo de este gallinero, y como la verdad, nadie se le para de frente, pues “casi casi” se imagina que va palomear todas las candidaturas y hasta las listas plurinominales de la oposición. Es algo penoso pero hay que reconocer que nadie se le asemeja en popularidad y audacia. Si saben a lo que me refiero.

 

@gandhiantipatro

Botón volver arriba