Recital de voz y piano, canciones de Paolo Tosti en el Museo Francisco Cossío
Se presentarán tenor Jorge Arturo Torres Ruiz y el pianista José María Espinoza Zuñiga
Entrada libre
El Museo Francisco Cossío, invita a todos los amantes de la música al Recital de Voz y Piano “Non t’amo più!”, Canzoni de Francesco Paolo Tosti, que se presentará este miércoles 11 de diciembre en punto de las 19:00 hrs. en la Sala Francisco de la Maza, a cargo del tenor Jorge Arturo Torres Ruiz y el pianista José María Espinoza Zuñiga. La entrada es libre.
El joven tenor potosino Jorge Arturo Torres Ruiz, ha preparado un programa con una cuidadosa selección de Canciones de Paolo Tosti y acompañado al piano por el igualmente joven José María Espinosa Zúñiga, deleitará al público con piezas como: Aprile, Ideale, Malía, Marechiare, La serenata, Ninon, Non t’amo più!, Sogno, Vorrei o L’ultima canzone.
Francesco Paolo Tosti (9-IV-1846 Ortona, Italia/2-XII-1916 Roma, Id), es sin lugar a dudas el más importante compositor de Canzoni italiani en el siglo XIX, escribiendo algunos de los títulos más célebres en lo que han sido llamadas coloquialmente Canciones napolitanas y que han sido interpretadas por todos los grandes cantantes.
Niño prodigio Tosti, inicio estudios musicales a muy temprana edad en su ciudad natal, Ortona, con maestros particulares mostrando de manera inmediata un talento innato para la composición. A los once años se trasladó al Conservatorio de San Pietro a Majella de Nápoles, donde sorprendió a los maestros por los rápidos avances mostrados, principalmente a Saverio Mercadante con quien estudiaba composición, quien incluso le consiguió un puesto como maestro asistente, lo que le proporcionó una importante remuneración económica y la ocasión de transmitir sus conocimientos a los jóvenes estudiantes Una grave enfermedad lo llevó de regreso a su casa.
Ya recuperado se trasladó a Ancona, donde trabajo sin mucho éxito, siendo inclusive sus composiciones rechazadas por la Casa Ricordi, luego pasó a Roma donde triunfó como tenor, lo que lo acerco a los más exclusivos círculos sociales romanos, donde fue escuchado por Margarita Teresa de Saboya (futura reina de Italia), que lo nombró su maestro de canto.
En 1870 se trasladó a Londres y ocupó un puesto similar en la corte de la reina Victoria y posteriormente con Eduardo VII. Aquí su fama como creador de canciones ya era enorme y las editoras se peleaban por imprimir sus estrenos, llegó a componer unas 500 canciones con textos de grandes poetas como: Antonio Fogazzaro, Rocco Pagliara o Gabriele d’Annunzio.
